viernes, 3 de junio de 2016

Palabras.

Imagen de illustration, art, and draw

Que al final las personas se iban de su vida
como se acababa yendo cada estación al llegar a su fin
parecía que nadie quería quedarse a su lado
y se hundió un poco más en aquel mar
lleno de mentiras y desilusiones.

Dicen que lo que más corta es el cristal,
pero no es verdad,
porque eso no es más que un material
que se acaba rompiendo nada más tirarse al suelo.
Las palabras no se rompen
y aún así siguen cortando en donde más duele,
siguen hiriendo,
siguen siendo el arma más poderosa de todas.

miércoles, 20 de abril de 2016

Ironía.

Imagen de art, blue, and ocean

Y es que al final una acude al mismo lugar, un sitio donde no sentirse tan sola, un sitio en el que poder aferrarse bien fuerte sabiendo que él no te va a poder soltar, la ironía de tener esa certeza de seguridad en algo que realmente no puedes ver. Así que cierras los ojos y te convences, cuando realmente lo único que ves es un cuadro mal difuminado, líneas que no se entiendes y que no tienes las fuerzas de entenderlas siquiera. Esperas ese atisbo de mensaje que te consiga hacerte volver a caer en la inocencia, que pinte tu mundo de color, y que al final puedes llegar a comprender el cuadro.

martes, 12 de abril de 2016

Pestañas.

Imagen de eyes, art, and blue

Y es que por más que lo intentara
no era capaz de olvidar sus pestañas,
y es que cuando el amor te atrapa
tienes que asegurarte de no cometer erratas.

A veces parece triste
a la vez en la cual te sientes volando sobre una nube
construyendo tus propias alas de papel
con el mismo papel con el que no pudiste fabricar aquel barco
con el que poder llegar a la costa
pisar tierra firme y dejar de una vez por todas las olas.



lunes, 11 de abril de 2016

Para paradojas la vida ya es suficiente.

Y que gran paradoja es esto de la vida
que en nada nos da y en nada nos quita.
Surcar mares solo nunca fue fácil
atravesar la tormenta como un náufrago
que verdaderamente nunca tuvo un barco,
atravesar las puntas de los cardenales
y que los ventrículos ya no den más de sí,
perderse en callejones que un día tuvieron salida
pero que al fin y al cabo la cerraron
porque se cansaron de suspirar por alguien que jamás iba a llegar.

domingo, 6 de marzo de 2016

Clavos.

Imagen de kiss, lips, and drawing

Que yo siempre negaba creer en el amor hasta que me cogió, o quizás no era eso, quizás era tan solo una simple ilusión que se hizo un hueco muy grande en mi corazón para luego partirlo en mil pedazos por los que muchas veces sentía que no valía la pena unir, era una dichosa contradicción de mi cabeza, a la que le hacía caso o me preparaba para aguantar una impotencia enorme de mi pecho izquierdo. Y es increíble lo mucho que parece doler, lo mucho que se te clava sin querer dejarte ser libre. Después de mucho tiempo una sigue igual, con ese miedo clavado en sus costillas que impide a su boca pronunciar las simples dos palabras que se tiene calladas durante mucho tiempo.

martes, 9 de febrero de 2016

Para mi pequeña margarita.

10 de febrero

La escala del piano cambió
mi si bemol se acompañó
por los acordes de tu guitarra,
o quizás fuera del revés.

La canción triste cobró vida,
las notas fueron lanzadas 
por la ventana
para revivir cada mustio pétalo.

La sonata de despedida
se tocaba cuando hacía falta
pero nunca llegó a ser triste,
lo único que hacía era entrelazar
los cuerpos de las personas
y juntar sus bocas.

Las flores crecieron juntas en el jardín
protegiendo sus pétalos
de cualquier niña que se los arrancaban
para saber si las querían.

Las dos protagonistas de aquellas canciones,
Selene y Emma,
decidieron dejar a esas melodías huir
para ser las protagonistas de sus propias vidas.

La tinta y el papel se unieron
para formar más poesía
con la única función
de hacer sentir.

Encendieron cerillas 
de las que surgió un fuego
que pudo iluminar,
y gracias a la luz
el tren siempre pudo pasar
por las mismas vías.

Y ahora dime,
¿qué habría sido del si bemol sin los acordes de la guitarra?
¿qué habría sido del diente de león o el tulipán sin la margarita?
¿qué habría sido de Emma sin Selene?
¿qué habría sido del papel sin la tinta?
¿qué habría sido de las vías sin el tren?
¿qué habría sido del once sin el diez?
¿qué habría sido de la segunda sin la primera?
¿qué habría sido de cé sin eme?

Recobecos.


Siempre he querido ser una artista, admiro cada detalle de arte, es como si todo estuviese trazado de tal manera para dar una composición de algo que tenemos dentro de nuestra cabeza. A veces parece ser lo más lejano de la simple vida, y es raro, porque el arte no es otra cosa más que una manera de vivir. 

Expresarse no siempre es fácil, querer transmitir cada recobeco que forma nuestra cabeza es frustrante, es sentir esa impotencia de demostrar o simplemente enseñar algo y que por unas cosas o otras no salga, como mirarse a uno mismo en el espejo y empezar a pensar en lo raro que es saber que esa es tu imagen, que eres esa persona que se muestra en el reflejo y que esa es tu vida, ¿de verdad que nunca os ha pasado? Quizás nunca lo hayáis pensado, no sé, a mí me pasa muchas veces, igual lo que pasa es que a veces sólo cuesta reconocerse a uno mismo.

Igual me estoy yendo mucho por las ramas, sólo vengo a expresar qué es lo que pienso y siento, vengo a compartir historias que no le susurro a nadie y que únicamente escribo en cada tecla de este ordenador.